sábado, 21 de junio de 2008

COMO LA MARIPOSA POSADA EN LA ALAMBRADA, INDIFERENTE A LA NOCIÓN DE LA MUERTE

El instante que media
entre una pregunta y su respuesta,
ese segundo de vacilación
propiedad de lo aún no concebido,
ese intervalo de vacío
en que respiran codiciosas,
como animales fabulosos y sin rostro,
las posibilidades.

de David Eloy Rodríguez, Asombros, colección Carne y Sueño, César Sastre Editor, 2oo6.

Le cojo prestada esta poesía a Sofía Castañón de su blog: http://mundoiconoclasta.blogspot.com/ Gracias Cecilia por dármela a conocer... algunas chicas de veintipico años intentamos expresarnos con peores resultados, nos perdemos con mayor facilidad entre las palabras o acabamos rumiando a poetas muertos al intentar expresar algo propio.
Hoy leí la poesía de David y no pude sentirme más identificada, lo que pasa es que mi intervalo de vacío a veces se extiende en exceso, o tal vez acaba sin que yo haya comprendido la respuesta, no se qué es peor.

2 comentarios:

CarmenS dijo...

Cada uno se expresa como le sale de las entrañas. Tú tienes tu forma, pero todavía estás buscando el molde adecuado. Que, tal vez, sólo te sirva para unos pocos años. Luego lo transformarás en otro.
Besitos

Marcelo dijo...

Tanto la poesía como tu reflexión son muy buenos. Ese momento mental me recuerda al ordenador en searching...¿Qué saldrá finalmente?