miércoles, 30 de enero de 2008

En un instante


Desearía profundamente quedarme en ese pensamiento, el pensamiento de un espacio brumoso y azul, en el horizonte indefinido que se eleva desde la entrada en una suave inclinación.
Había un abismo donde debería haber estado dibujado tal horizonte, el abismo es una señal de peligro que no quisimos reconocer. El azul es un color que engaña y aquella bruma no parecía amenazadora, más bien pacificadora... el vacío como nuevo concepto de jardín donde reposar la mente: puede usted acudir cuando sienta que es imperativo escuchar la brisa entre las hojas de los árboles, entre la hierba.
Alli no habrá árboles, ni hierba, ni vida animal o vegetal más que la suya, sin embargo, podrá usted imaginarla si así lo desea. Se podrá pensar muerto si lo considera más apropiado, reconfortarse creyendo firmemente que la muerte es así, un brumoso espacio para la paz donde el exceso de pensamientos es rápidamente silenciado.
No podemos pagar por regresar allí, y vosotros no podéis pagar nada por llegar hasta aquella bruma, sirva de consuelo el pensar que no era un espacio de fiar, aquel abismo.... ¿dónde acababa? Por otro lado, queda esta foto y la posibilidad de pensar lo que imaginaríamos de estar allí; no penséis en cómo debe ser, pensar en cómo desearíais que fuera y así será.
Durante muchos años imaginé mil historias a traves de los jardines de la Toscana que miraba cada semana en un libro de mi casa; cuando pude ir a tocarlos no me decepcionaron.
Se piensan los espacios de una manera, se experimentan de otra y no son de ninguna de ellas, por eso nunca pueden decepcionar, no hay ideas preconcebidas, sólo imaginación

lunes, 28 de enero de 2008

Volvemos a empezar

La vida podría ser mucho más fácil, pero si permitiéramos que lo fuera dejaría de merecer la pena.
Una vez más, vuelvo a empezar un blog al que deseo más larga vida que a los anteriores (el anterior dejó de escribirse porque olvidé mi contraseña, no sabéis que cruz es compartir cuerpo con mi cerebro a veces).
Esta vez intentaré centrarme desde el principio en esos temas tan aburridos que hacen bajar las visitas hasta las cifras más raquíticas... Bueno, para eso estamos: poesía, cine, pintura, literatura, filosofía, escultura, videoarte; básicamente van a ser los temas de conversación.
Intentaré aprender de los amigos americanos, que por lo que he podido comprobar en los últimos meses saben sacarle el mejor provecho a esta clase de páginas.
Solo espero que podáis disfrutarlo, se admiten sugerencias y de hecho se agradecen abiertamente.

Para comenzar, la poesía que da nombre a este blog:


The Hand That Signed The Paper

The hand that signed the paper felled a city;
Five sovereign fingers taxed the breath,
Doubled the globe of dead and halved a country;
These five kings did a king to death.

The mighty hand leads to a sloping shoulder,
The finger joints are cramped with chalk;
A goose's quill has put an end to murder
That put an end to talk.

The hand that signed the treaty bred a fever,
And famine grew, and locusts came;
Great is the hand that holds dominion over
Man by a scribbled name.

The five kings count the dead but do not soften
The crusted wound nor pat the brow;
A hand rules pity as a hand rules heaven;
Hands have no tears to flow.
Habrá que comentarlo, no? Aqui no estamos para hablar de política, pero reconozco que esta poesía invita a ello. Queda abierta la veda a los comentarios mordaces.